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miércoles, 23 de mayo de 2012

Capitulo 1. andrew & cristina





Era una mañana algo fría y poco usual, Andrew se despertó lentamente, intento recordar lo que había soñado la noche anterior pero no lo logro, lo cual a veces le desanimaba un poco por qué entonces no podía escribir el sueño.  La luz del sol que comenzaba a atravesar  la ventana tipo vitral de su cuarto le daba a la habitación esos colores y esa sensación tan familiar para él y que recordaba desde que tenía memoria… 



No quería levantarse, hacia demasiado frio, pero pronto como empezó a quedarse dormido de nuevo escucho unos golpecitos a su puerta.



-Andrew, levántate…- dijo la voz delicada de una chica, y Andrew escucho como el cerrojo de su puerta se abría dando paso a una linda chica albina de ojos verdes, vestida con una camisa manga larga beige, una falda larga marrón claro y unas sandalias sencillas.  – Vamos Andrew…- dijo y acercándose a él lo tomo de un hombro intentando despertarlo. Andrew abrió los ojos adormilado y miro a la chica.



-te estamos esperando allá abajo, Andrew, vamos… - dijo la chica cerca de él.



-bien… ya voy, ya voy…- dijo Andrew, moviéndose un poco entre las sabanas  y obedeciendo sin muchas ganas se sentó en la cama medio arropado y la chica arreglando un mechón de su cabello casi blanco detrás de su oreja se disponía a irse diciendo que lo esperaba en el comedor.



  -ok, margarita… iré en un momento...-  le dijo Andrew  y ella salió del cuarto cerrando la puerta.







Ya solo en su cuarto, Andrew volvió a tirarse en la cama, se estiro como siempre lo hacía y estiro su brazo hasta su mesa de noche para tomar sus lentes y se los puso…      













Después de darse un baño y arreglarse, Andrew bajo del tercer piso por las escaleras en donde estaba su habitación  hasta el comedor en la planta baja de la casa donde lo esperaban tres monjas, la chica albina, dos niñas, un niño y un padre, todos sentados en una gran mesa ovalada de madera. 


Buenos días- dijo Andrew  abriendo la puerta y miro a las personas que lo se encontraban allí, a su familia… 

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